lunes, 21 de noviembre de 2011


Al primer año de vida aprendí lo importante que es un juguete. sobre todo si sabe rico.
A los 2 años, aprendí que caerse duele. A los 3, aprendí que duele más una palabra que un golpe.
A los 4 años aprendí lo interesante que puede ser un rompecabezas, y a los 5, lo confortante que se siente un abrazo de mamá cuando algo me daba miedo o simplemente cuando necesitaba sentirme amado.
A los 6 años, aprendí que las tortugas tambien pueden morir quemadas, y a los 7, que no todo se puede arreglar con un berrinche. A los 8 años aprendí a amar la danza y que eso me hacia sentir que podía volar.  
A los 9 años, aprendí que mi profesora sólo me preguntaba cuando yo no sabía la respuesta.
A los 10 años, aprendí que era imposible estar "enamorada" de cuatro chicos al mismo tiempo.
A los 11 años, aprendí que, si tenía problemas en el colegio, los tenía más grandes en casa.
A los 12, aprendí lo importante que puede ser un escrito alto mas que nada si pretendía salir.
A los 13 años, aprendí que los verdaderos amigos se cuentan con los dedos de una mano.
A los 14 años aprendi, el verdadero significado de un "te quiero".
A los 15 años, aprendi que mi hermano no era mi mayor enemigo, y que podía ser mi mejor confidente.
A los 16, aprendi lo importantes que son los verdaderos amigos.
A los 17 años, aprendí que emborracharte no siempre es el mejor sentimiento, (menos al otro día) y que no es la mejor forma de solucionar los problemas.
A mis 18 años, aprendí que no valía la pena discutir con mi familia,  que duele mucho dejar a alguien que amas,  que los grandes problemas siempre empiezan pequeños, que un libro puede llegar a ser una buena compañía,  que si encuentras a la persona adecuada te puede enseñar a amar. Pero tambien aprendí lo que es extrañar a alguien y lo grato que es volverlo a encontrar. Aprendí que con el tiempo las cosas se miran de una forma diferente, que aunque me quiera comer el mundo aun me falta mucha experiencia, que no importa lo lejos que viajes cuando quieras huir de algo, tus problemas siempre te acompañaran a lo largo de toda la travesía. Aprendí que "hacer" lleva mucho tiempo, en un instante sepuede deshacer. Aprendí que se necesita mucho amor, paciencia e inteligencia para vivir con alguien. Aprendí que no se cometen muchos errores con la boca cerrada.
Y en estos 18 años, entendí que mi abuela no va cambiar y sigue siendo inútil discutir con ella. Comprendí lo lejos que estaba de saber quien era. Entendí que esa persona espercial ya no va a volver. Aprendí que muchas veces los errores se repiten y duelen igual que la primera vez. Aprendí que ser buen amigo no se trata solo de recibir. Pero tambien aprendí, que, si estás llevando una vida sin fracasos, no estás corriendo los suficientes riesgos.


Luego, al pasar de los años aprendí que puedes hacer a alguien disfrutar el día con solo con un pequeño detalle que casi siempre no cuesta nada.
Que niños y abuelos son aliados naturales.
Que ver una buena película puede darme una tarde agradable.
Que aprender a aceptarme como soy me puede ayudar a no sentirme tan sola.
Que no puedo cambiar lo que pasó pero puedo dejarlo atrás.
Que las cosas que te pasan y que te duelen siempre te dejan una enseñanza y esta en uno aprender de ella.
Que nunca es tarde para decir "lo siento" y "perdón", que puede doler pero sé que después me voy a sentir mejor.
Que nunca es tarde para decir la verdad (por mas dura que sea) y que tampoco es tarde para enfrentar a quien le hice daño si aquélla persona te quiere te sabrá entender y perdonar.
Que pedir ayuda puede dar mucha vergüenza y miedo, pero que a veces es necesario y hay que sacar fuerzas y valor para hacerlo.
Que la mayoría de las cosas por las cuales me he preocupado nunca suceden.
Que es absolutamente imposible tomar vacaciones sin engordar cinco kilos.
Que nunca se debe ir a la cama sin resolver una pelea.
Que me hubiera gustado tener la experiencia que tengo ahora cuando era mas chica, seguramente no habría dejado pasar muchas oportunidades.
Y que ahora entiendo que eso es imposible y que solo me queda aplicar mis experiencias y no perder mas oportunidades.
Que si las cosas van mal, yo no tengo por qué ir con ellas.
Aprendí que envejecer es importante. (Bienvenidos 19!)
Aprendí que amé menos de lo que hubiera debido.
Y hoy... me doy cuenta que todavía... tengo mucho para aprender y...que no importa la edad que tengas, aun estás a tiempo de cambiar las cosas y ser feliz... :)

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